En un paso histórico hacia la diversificación energética y la innovación tecnológica nacional, la Provincia de Buenos Aires pondrá en marcha el primer dispositivo argentino de energía undimotriz, que transforma el movimiento de las olas del mar en electricidad. El sistema será instalado nada menos que en la Escollera Norte de Mar del Plata, marcando un hito para la ciencia, la industria y la sostenibilidad del país.
Esta tecnología, también conocida como energía olamotriz, aprovecha la fuerza incesante del mar para producir energía limpia, sin emisiones ni combustibles fósiles. La movida cuenta con el respaldo del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos bonaerense, en articulación con la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y el Foro Regional de Energía de Buenos Aires (FREBA).
“Es un hito para la industria y la ciencia argentina. Este proyecto reúne investigación aplicada, transferencia tecnológica y producción local”, expresaron desde el Ejecutivo provincial.
Energía renovable con sello nacional
El dispositivo se desarrollará y financiará con fondos del Programa Provincial de Incentivos a la Generación de Energía Distribuida Renovable (PROINGED), una iniciativa que se sostiene con un pequeño cargo tarifario que todos los bonaerenses pagan en su factura de luz. En este caso, esa inversión ciudadana se convierte en innovación al servicio de la transición energética.
La firma del convenio se realizó en el Centro Bonaerense de Energías Renovables y participaron figuras clave del ámbito público y académico: Gastón Ghioni (Subsecretario de Energía), Fernando Pini (presidente de FREBA), Guillermo Oliveto (decano de la UTN Regional Buenos Aires), entre otros.
¿Por qué es importante?
En medio del debate global por el cambio climático y la necesidad urgente de abandonar los combustibles fósiles, este desarrollo coloca a la Argentina en la senda de las energías del futuro. Mientras otros países ya exploran la energía de las olas, este será el primer sistema en escala real fabricado y probado en el país.
Además, el proyecto fortalece la articulación entre Estado, universidad y sector privado, y posiciona a la Provincia de Buenos Aires como un actor clave en la transición energética en América Latina.
Una nueva ola energética
En Mar del Plata, el mar será más que un atractivo turístico: también será una fuente de energía renovable. Y si este proyecto piloto funciona como se espera, podría ser replicado en otras zonas costeras del país.
Este tipo de iniciativas no solo apuntan a reducir la huella de carbono, sino también a generar empleo calificado, promover tecnología nacional y hacer de la Argentina un país más resiliente y soberano en materia energética.