Desde hace dos semanas el fuego no cesa en las islas de Santa Fe y Entre Ríos. Desde 2020, se quemaron más de un millón de hectáreas en la zona. La necesidad urgente de la ley de humedales.
Otra vez arde Santa Fe. Desde distintos puntos de la provincia, se observan las grandes columnas de humo que impregnan el aire de la ciudad y dañan la salud de sus habitantes. “El aire que estamos respirando en esta región contiene un nivel de toxicidad muy elevado. Esto tiene que parar. Están atentando contra nuestros territorios, contra nuestras vidas”, dice el fotógrafo Sebastián López Brachs en sus redes sociales.
Desde hace dos semanas el fuego no cesa en las islas del Delta del Paraná y según un informe del Museo Scasso las hectáreas afectadas producto de las quemas intencionales superaron las 65 mil en lo que va del año. Si se mira en retrospectiva, las cifras son aún más alarmantes: desde 2020 se quemaron más de 1.000.000 de hectáreas del Delta del Paraná; 112 veces la superficie de la ciudad de Rosario. Las llamas atraviesan el cielo y el humo no deja respirar. La situación es crítica en todo el país: se registraron focos también en la localidad cordobesa de Mar Chiquita, en el norte santafecino y en el Delta del Río del Paraná en Entre Ríos.
El peligro de la época de “La invernada”
A su vez, en esta época del año se suele producir “la invernada”: temporada en que el fuego se usa como mecanismo para generar rebrotes que sirven de alimento para el ganado. “Estamos en temporada alta de incendios”, dice Roberto Rioja, Secretario de Protección Civil de la Provincia de Santa Fe en el programa radial rosarino “Nadie es perfecto”. El repudio popular no se hizo esperar. Activistas, vecinos e integrantes de organizaciones socioambientales llevaron a las calles, una vez más, la demanda histórica por una normativa que proteja y regule la actividad humana en los humedales.
“Con la convicción de seguir defendiendo lo único que nos garantiza la vida, nuestros bienes comunes, nuestro Paraná y nuestros humedales, estaremos donde haya que estar. Frente al silencio cómplice seguimos gritando BASTA DE QUEMAS, ¡LEY DE HUMEDALES YA!”, expresan desde la Multisectorial de Humedales, organización de ciudadanos autoconvocados por la preservación y restauración de los humedales del Delta del Paraná y de todo el país.
La importancia de los humedales
Los humedales no son un paisaje más: regulan el clima, permiten la retención de sedimentos y sustancias tóxicas, son una fuente fundamental de agua potable y albergan una rica y variada flora y fauna. Sin embargo, son utilizados principalmente para la actividad agrícolaganadera, la explotación minera y forestal y para el desarrollo de negocios inmobiliarios. En consecuencia, el ecosistema se degrada cada vez más, se pierde biodiversidad y se aceleran fenómenos climáticos extremos como sequías e inundaciones.
De todas formas, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación informó el aumento de la producción de carne para garantizar la entrada de divisas. Para ello, desde el gobierno pusieron en marcha el Plan Ganadería Argentina 2022-2023 (GanAr) que prevé incrementar en 600 mil toneladas la producción para fomentar el consumo interno y lograr exportar 1,5 millón de toneladas de carne.
A su vez, la actual Ministra de Economía de la Nación, Silvina Batakis, propone un proyecto para “poner en valor y convertir aproximadamente 1.5 millones de hectáreas en tierras productivas”. La pregunta que se hacen especialistas es ¿productivas para quienes y bajo qué condiciones?
¿En qué estado está la Ley de Humedales?
A pesar de la emergencia climática y ecológica, aún no contamos con una Ley de Humedales. Si bien en marzo el diputado nacional Leonardo Grosso encabezó una nueva presentación del dictamen, no hubo avances significativos en cuanto al tratamiento en las Cámaras. Por su parte, el pasado 11 de julio, el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible Juan Cabandié anunció un nuevo proyecto de Ley de Presupuestos Mínimos para la Conservación y Uso Sostenible de los Humedales en la Asamblea Ordinaria 103 del Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA).
Este nuevo proyecto pretende basarse en el presentado por Grosso, pero cuenta con modificaciones claves que generaron un rechazo contundente en la sociedad civil. “Eliminaron la moratoria y el plazo para el inventario de humedales, modificaron la definición de humedal dejando a muchos afuera, minimizaron la participación ciudadana y de las organizaciones territoriales y suprimieron más de 11 principios”, sostienen desde la Multisectorial de Humedales y agregan: “Queremos nuestra ley, la que nos incluye, la que construimos y que ya fue apoyada. Queremos que se habilite el tratamiento en Comisiones del proyecto consensuado. Queremos plenario de comisiones. Queremos #LeyDeHumedalesYA”.
¿Cuál es la salida?
Desde el Acuerdo Basado en Plantas, se plantea abordar la problemática desde una perspectiva ambiental, de derechos humanos y animales y cuestionando nuestros hábitos más inmediatos. La transición hacia sistemas alimentarios más justos, soberanos y basados en plantas es la punta de lanza para redefinir el modelo de producción y consumo actual y sentar las bases para un futuro con comida sana, libre de agrotóxicos e impacto ambiental.
Fuente: Perfil