Récord histórico: Argentina exportó más de 44 millones de kilos de yerba mate en 2024, pero los pequeños productores enfrentan un futuro incierto

ACTUALIDAD30/01/2025La Política AmbientalLa Política Ambiental
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En un hito para la industria yerbatera, Argentina alcanzó en 2024 un récord histórico de exportaciones de yerba mate, superando los 44 millones de kilos enviados a distintos rincones del mundo. Este logro, resultado de años de esfuerzo de toda la cadena de producción yerbatera y el apoyo constante del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), refleja el crecimiento de la yerba mate argentina en mercados internacionales, consolidando su presencia como un producto emblemático de nuestra cultura y tradición.

Sin embargo, detrás de este éxito, se esconde una realidad preocupante para los pequeños productores y las cooperativas yerbateras, que se encuentran atrapados entre el aumento de costos y los bajos precios de venta que, lejos de beneficiarlos, podrían poner en peligro su supervivencia.

Un esfuerzo conjunto que marca la diferencia, pero ¿a qué costo?

Según datos estadísticos, entre enero y diciembre de 2024, las exportaciones de yerba mate totalizaron 44.019.308 kilos. Este récord no fue fruto de la casualidad, sino de una estrategia que incluye el trabajo conjunto entre el INYM y los productores, que se refleja en la participación argentina en diversas ferias internacionales. Los pabellones de Yerba Mate Argentina en eventos alimentarios globales no solo sirven para mostrar el producto, sino también para establecer conexiones comerciales que abren puertas a nuevos mercados.

Sin embargo, mientras los grandes jugadores de la industria yerbatera celebran el crecimiento de sus exportaciones, los pequeños productores se enfrentan a un panorama cada vez más desalentador. En un contexto de inflación y aumentos de costos, los precios de la yerba mate que reciben los agricultores no han logrado mantener el ritmo de los incrementos en sus costos de producción. En particular, el gobierno de Javier Milei ha sido muy criticado por los sectores más vulnerables de la cadena yerbatera por no implementar medidas efectivas para garantizar un precio justo para los pequeños productores.

Las políticas del gobierno actual, que priorizan la flexibilización de precios y la reducción de subsidios, han generado una gran preocupación entre los pequeños agricultores y las cooperativas, que se ven empujados a vender su producción a precios muy bajos, poniendo en riesgo su estabilidad económica. La falta de un ajuste que permita a los productores cubrir los costos de producción y garantizar una ganancia mínima podría llevar a muchos de ellos a la quiebra, afectando gravemente a las economías regionales y poniendo en jaque la sustentabilidad de la industria yerbatera a largo plazo.

Siria y Chile, los destinos más destacados

Entre los principales destinos de exportación, Siria se consolidó como el mayor receptor de yerba mate argentina, seguido de cerca por Chile. En paralelo, creció la presencia en mercados como los Estados Unidos, España y otros países de Europa, donde los amantes de la yerba mate son cada vez más numerosos. Además, la yerba argentina empezó a tener mayor presencia en mercados emergentes como la India, lo que augura nuevas oportunidades de expansión en los próximos años. Uruguay, otro tradicional comprador, también figura entre los destinos clave.

Cosecha y consumo: la yerba en las góndolas

A nivel nacional, el mercado interno no se queda atrás. Durante 2024, la yerba mate enviada a los molinos para su distribución en el mercado local alcanzó los 258.813.653 kilos, un número que, sumado a las exportaciones, lleva el total anual de yerba mate a la impresionante cifra de 302.832.961 kilos. Este volumen refleja el consumo sostenido del producto, tanto en hogares como en comercios, donde el paquete de medio kilo sigue siendo el preferido por los consumidores. De hecho, en diciembre de 2024, este formato representó el 56,68% de las salidas de molinos al mercado interno. Los envases de un kilo, con el 37,67%, también mantienen una participación destacada.

El calendario de cosecha: una tradición que se renueva

El proceso de cosecha de la yerba mate en Argentina se distribuye en tres etapas bien definidas: la zafra gruesa (de abril a septiembre), un período de suspensión de cosecha (octubre y noviembre), y la zafra de verano o "zafriña" (de diciembre a marzo). En 2024, el acumulado de hojas verdes ingresadas a los secaderos fue de 986.737.613 kilos, una cifra que refleja el continuo abastecimiento de la industria durante todo el año.

El futuro de la yerba mate argentina: un desafío para los pequeños productores

A pesar de los récords de exportación y el crecimiento de la yerba mate en mercados internacionales, la falta de apoyo real a los pequeños productores podría poner en peligro la sustentabilidad de la industria en el futuro. La yerba mate, símbolo de nuestra identidad nacional, sigue siendo un referente de la cultura argentina, pero si el gobierno no toma medidas para garantizar precios justos y condiciones de trabajo dignas para los productores, este éxito podría quedar opacado por la crisis interna de las economías regionales.

Si el gobierno de Milei continúa con su política de ajuste en detrimento de los pequeños productores, el futuro de la yerba mate argentina podría estar en serio riesgo, afectando no solo a los agricultores, sino también a la estabilidad de una industria que, hoy por hoy, sigue siendo un emblema del país en el mundo.

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