Un estudio territorial de Techo y Jóvenes x el Clima revela que 4 de cada 10 barrios populares enfrenta riesgos ambientales graves. La falta de infraestructura empeora la situación, especialmente en el Gran Buenos Aires, el NOA y la región pampeana, poniendo en peligro a miles de familias ante cada tormenta.
Un informe de las organizaciones Techo y Jóvenes x el Clima alerta que 4 de cada 10 barrios populares en Argentina se encuentran expuestos a al menos un factor de riesgo ambiental, como la proximidad a cursos y cuerpos de agua, la presencia de residuos y la alta vulnerabilidad a inundaciones por precipitaciones.
Estos factores, sumados a la falta de recursos e infraestructura adecuada, hacen que cada tormenta o lluvia intensa genere problemas gravísimos para las familias afectadas, incluyendo riesgos de muerte.
El estudio destaca que el 50% de los barrios populares están situados en zonas inundables, mientras que el 30% presenta microbasurales, una combinación que potencia el impacto de los fenómenos climáticos adversos.
La concentración de estos factores de riesgo es particularmente alta en el Gran Buenos Aires, donde se encuentra la mayor cantidad de barrios populares. Sin embargo, el mayor porcentaje de barrios en situación de riesgo se registra en el NOA, la región pampeana y el Gran Buenos Aires, según el análisis territorial realizado.
Este informe subraya la urgente necesidad de políticas públicas que atiendan la exposición a riesgos ambientales en los barrios populares, protegiendo a las familias que viven en condiciones de alta vulnerabilidad.
Techo es una organización no gubernamental (ONG) sin fines de lucro presente en varios países de América Latina. Su misión es trabajar para superar la situación de pobreza en la que viven millones de personas en asentamientos precarios y barrios populares a través de la acción conjunta de voluntarios y los habitantes de esas comunidades.
A su vez, Jóvenes por el Clima (Jóvenes x el Clima) es un movimiento juvenil argentino que forma parte de la iniciativa global por la justicia climática. Fundado en 2019 por un grupo de jóvenes activistas, este movimiento busca sensibilizar, movilizar y presionar a los gobiernos y a la sociedad en general para que tomen acciones urgentes frente a la crisis climática.