Grave crisis ambiental en San Pedro: el intendente irá a indagatoria por contaminación del río Paraná
ACTUALIDAD26/12/2024La Política AmbientalEl impacto ambiental y sanitario del vertido de efluentes cloacales sin tratamiento en el río Paraná ha llevado al intendente de San Pedro, Cecilio Salazar, y a otros cuatro funcionarios y exfuncionarios municipales a enfrentar la Justicia. El Juzgado Federal N°2 de San Nicolás dispuso sus declaraciones indagatorias, acusándolos de incumplimiento de los deberes de funcionario público en concurso real con contaminación ambiental, tipificados en los artículos 248 del Código Penal y 55 de la Ley N°24.051 de Residuos Peligrosos.
Treinta años sin tratamiento de efluentes
El eje central del conflicto radica en que la planta de tratamiento cloacal de San Pedro lleva más de 30 años inactiva. Según las investigaciones del fiscal federal Matías Di Lello y la Unidad Fiscal para la Investigación de Delitos contra el Medio Ambiente (UFIMA), los efluentes son vertidos directamente al río Paraná a través de un sistema de bypass, generando niveles alarmantes de contaminación fecal, con presencia de Escherichia coli y otros agentes infecciosos.
Los estudios periciales han demostrado que los valores de demanda química de oxígeno (DQO) y sólidos sedimentables superan ampliamente los límites permitidos por la Resolución ADA 336/03 de la Autoridad del Agua de la provincia de Buenos Aires.
Responsabilidades y negligencia institucional
El intendente Cecilio Salazar, junto con el secretario de Obras y Servicios Públicos, Mariano Brañas, el director de Servicios Sanitarios, Jorge Ponzio, y los exfuncionarios Javier Silva y Ariel Álvarez, serán indagados los días 18, 19 y 20 de marzo de 2025.
El fiscal Di Lello sostiene que los funcionarios tenían pleno conocimiento de la situación y que, a pesar de los reiterados informes técnicos, no implementaron medidas para solucionar la problemática. Además, se confirmó que no existen proyectos presentados ante el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la provincia de Buenos Aires para optimizar o construir una nueva planta depuradora.
Una problemática histórica
El conflicto no es nuevo. Desde 1982, cuando la planta dejó de funcionar, se acumulan 22 ordenanzas, 33 resoluciones y cinco comunicaciones en el Concejo Deliberante de San Pedro. Sin embargo, nunca se avanzó en una solución estructural.
En agosto de 2023, tras una medida cautelar ordenada por el juez Villafuerte Ruzo, el Concejo Deliberante emitió una resolución exigiendo la eliminación de las conexiones ilegales de vertido y la puesta en funcionamiento de la planta de tratamiento. A pesar de ello, la situación no ha mejorado y el vertido de desechos cloacales continúa diariamente en el río Paraná.
Grave impacto en la salud pública
El estudio realizado por la UFIMA determinó que la contaminación tiene la característica peligrosa "H6.2" de la Ley N°24.051, lo que significa que contiene microorganismos viables o toxinas capaces de provocar enfermedades en humanos y animales.
Además, los niveles de contaminación afectan directamente a una zona recreativa cercana al puerto, utilizada frecuentemente por los habitantes de San Pedro, lo que agrava aún más la situación desde una perspectiva sanitaria y social.
El silencio de las autoridades provinciales
Sergio Benet, director provincial de Agua y Cloaca de la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la provincia de Buenos Aires, declaró que nunca recibió propuestas concretas para la optimización de la planta depuradora ni para la construcción de una nueva.
Esta falta de acción refleja no solo una omisión local, sino también una falta de respuesta por parte de las autoridades provinciales, que deberían haber intervenido ante la magnitud de la crisis ambiental en San Pedro.
Un problema que atraviesa fronteras
La contaminación en San Pedro no es un fenómeno aislado. La investigación inicial se originó a partir de muestras tomadas en el río Baradero, donde se detectaron altos niveles de coliformes fecales. Esto llevó a la Policía Federal a ampliar la pesquisa hacia San Pedro, donde se constató el origen de los vertidos cloacales.
¿Justicia ambiental en camino?
El caso de San Pedro se ha convertido en un emblema de la desidia ambiental e institucional que afecta a muchas localidades argentinas. La indagatoria de los funcionarios es un paso importante, pero no garantiza por sí sola una solución definitiva.
La comunidad de San Pedro espera respuestas concretas, no solo en términos judiciales, sino también en acciones efectivas que aseguren el saneamiento de las aguas y la protección de la salud pública.
El río Paraná no puede esperar más. Las autoridades tienen una deuda histórica con su gente y con el ambiente.